Milei, un presidente "envalentonado" por la mejora de la inflación en Argentina con la pobreza disparada
En su primer año como presidente, la inflación ha bajado del 25,5% al 3,5%, mientras más del 50% de los argentinos son pobres. Su índice de aprobación se mantiene en torno al 44%.
Con los gritos de "¡Viva la libertad!" de miles de personas a las puertas del Congreso de Argentina, Javier Milei recibió hace un año el bastón de mando y la banda presidencial de manos de Alberto Fernández con la promesa de utilizar su motosierra para reducir el gasto gubernamental y frenar la impresión de más pesos.
A lo largo de este primer año de presidencia, Milei no se ha contenido y ha empleado los dientes de su motosierra para suprimir ministerios, reducir los medios de comunicación públicos y recortar subsidios.
Desde que llegó a la Casa Rosada, ha logrado reducir una de las mayores pesadillas de Argentina: la inflación. En una entrevista con el diario Financial Times, el presidente argentino insistió en que "lo peor ya ha pasado" y que su Gobierno está "sentando las bases para un fuerte crecimiento".
Pero las medidas que ha llevado a cabo en este año han elevado las tasas de pobreza a máximos que no se habían visto en 20 años. Además, los precios de los alimentos y del transporte se han encarecido.
"Lo que vemos es un presidente envalentonado con este apoyo que todavía conserva y con lo que ve como resultados económicos positivos", comenta a MLK News la politóloga y directora de Ciencia Política de la Universidad de Buenos Aires, Elsa Llenderrozas. "Un presidente dispuesto a endurecerse en el sentido de no ampliar la base de coaliciones políticas de su espacio, sino más purezas, más concentrarse en su espacio. Es un presidente que no tiene una actitud cooperativa en términos políticos, de construcción de alianzas más amplias, sino de concentrarse y lograr más pureza ideológica en su fuerza política", explica.
Por su parte, el profesor del Departamento de Sociología de la Universidad de Salamanca y exprofesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Pontificia Comillas Pablo Biderbost cree que "es muy pronto para decir que técnicamente lo peor ya ha pasado". "Probablemente, desde el punto de vista de ciertas medidas políticas, el tomar medidas duras, quizá ya se concentró todo este primer año, pero desde el punto de vista técnico, de las consecuencias de esas medidas, hay que esperar", señala a MLK News Biderbost, quien subraya que "la desaceleración completa de la inflación es algo que está por ver".
Una inflación controlada a cambio de aumentar la desigualdad
Uno de los grandes problemas a los que se enfrentaba Argentina hace un año era una inflación completamente desbocada. Milei ha cumplido lo que prometió en su campaña: "Tomar una motosierra para erradicar el Estado".
La inflación, el eterno problema de Argentina y la principal prioridad del presidente, ha bajado del 25,5% registrado en diciembre de 2023 -cuando Milei asumió el cargo- al 3,5% en septiembre de 2024.
"El mayor de los éxitos que ha tenido ha sido que, excepto la promesa de la dolarización de la economía que era inviable, el resto de sus promesas electorales las ha cumplido: reducción del gasto público, desregulación económica y apertura comercial", indica a MLK News el profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) Fernando Harto.
"En la inflación ha habido una reducción importante (...). Todas las fuentes coinciden en que la inflación, que estaba desbocada hace un año, su gestión la ha mantenido no solamente bajo control, sino con una reducción significativa", señala. "El problema ha sido el precio que ha habido que pagar por estos logros", añade.
A pesar de que Milei ha logrado que la economía de Argentina empiece a remontar, la población se ha visto totalmente afectada por su programa de recortes. El país ha registrado en el primer semestre de año su peor tasa de pobreza en 20 años, con cerca del 53% de la población. Es decir, unos 25 millones de argentinos -más de la mitad de la población- son pobres, entre ellos casi siete de cada 10 niños, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censo (Indec).
La supresión de los subsidios por parte de Milei ha provocado que los precios del transporte se hayan incrementado hasta un 26,3% respecto a diciembre de 2023 y los alimentos y bebidas no alcohólicas un 20,4%.
Además, el Gobierno argentino ha logrado reforzar el veto a una ley que proponía un aumento en la financiación de las universidades públicas gracias al apoyo del conservador PRO, del expresidente Mauricio Macri.
Llenderrozas señala como uno de los mayores fracasos de Milei en su primer año en la Casa Rosada "el nivel altísimo de pobreza referido también al freno en la actividad económica" y subraya que "parte de los aspectos negativos de este Gobierno tiene que ver con muchos aspectos que ponen en duda el compromiso del presidente con la institucionalidad republicana".
"Me refiero a toda clase de insultos y ataques al resto de instituciones del Estado, por ejemplo, al poder legislativo, ataques del presidente, insultos a los disputados y legisladores y senadores de la oposición a quienes los llama ratas", comenta esta profesora argentina.
"A lo largo del año ha sido un presidente que prometió e hizo su campaña para enfrentar a lo que llamaba la casta y, sin embargo, es un presidente que ha incluido en su gobierno a muchos de los ministros de gobiernos anteriores, incluso kirchneristas, como el propio Daniel Scioli o su jefe de gabinete, Guillermo Francos", destaca.
Una política internacional "errática" y "excéntrica"
El tono incendiario que tuvo Milei durante su campaña electoral se ha traducido en la práctica en crisis diplomáticas. Durante su primer año de mandato, el presidente se ha enfrentado a los líderes de diferentes países de América Latina, entre ellos el brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, el venezolano, Nicolás Maduro y también el colombiano, Gustavo Petro, y el expresidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
El presidente argentino también se enzarzó en mayo en una crisis diplomática con España después de que en un acto de Vox calificara al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de "calaña de gente atornillada de poder" y de "corrupta" a su mujer, Begoña Gómez.
Por su parte, el ministro de Transportes español, Óscar Puente, se refirió a la "ingesta de sustancias" de Milei, que, según dio a entender, le provocaba decir exabruptos. Tras varios días de declaraciones cruzadas, el Gobierno español retiró a su embajador en Buenos Aires, pero meses después el Consejo de Ministros aprobó el nombramiento de un nuevo embajador, dando por cerrada la crisis con Milei.
"El tema de política exterior merece un capítulo aparte. Es el área donde ha habido más traspiés, más cambios y más decisiones que han ido en contramarcha de lo que ha sido la tradición diplomática argentina", comenta Llenderrozas.
"En muchos sectores son muy críticos de la política exterior de Milei, en la relación con Brasil, en la relación con el resto de los países latinoamericanos, incluso contramarchas y giros pragmáticos, como con China", indica esta profesora argentina, quien menciona también los conflictos que ha tenido con los distintos presidentes latinoamericanos. "Sin olvidar el enfrentamiento y la discusión y el conflicto político que generó con España. Esta ha sido su lógica, su lógica de confrontación, siempre teniendo en cuenta la agenda doméstica, sin medir los costos diplomáticos que tienen todas esas medidas", asevera.
Estas relaciones tan polémicas con algunos homólogos de países vecinos contrastan con los elogios a Israel y, especialmente, a Estados Unidos. Milei ha sido el primer líder extranjero en reunirse con Donald Trump después de su victoria en las elecciones presidenciales en Estados Unidos. Asimismo, recientemente ha anunciado que su Gobierno y el de Israel están trabajando en un memorándum "en defensa de la libertad, la democracia, el combate con el terrorismo y la dictadura" y ha mostrado su "tajante" rechazo a las órdenes de arresto emitidas por el Tribunal Penal Internacional (TPI) contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el exministro de Defensa, Yoav Gallant.
A juicio de Biderbost, otro de los fracasos de Milei en este primer año ha sido "romper alianzas provisionales a nivel internacional". "Hoy por hoy, Argentina vota alineada siempre a determinados países. En el G20 pareció que estuvo aislada de muchas conversaciones. Argentina no acaba de participar en la conmemoración del 40 aniversario de la intercesión que hizo El Vaticano para evitar la guerra de las dictaduras, la de Pinochet y Videla", afirma.
El profesor de la UCM califica las relaciones internacionales de Milei como unas "que reflejan bastante su personalidad un poco errática y excéntrica". "Ha fortalecido vínculos con líderes como Donald Trump, como Emmanuel Macron, y eso entra dentro de la lógica, puesto que la proximidad ideológica con ambos líderes desde la oposición de Milei es obvia. Durante la campaña electoral criticó ácidamente a China por ser un país comunista y luego, cuando ha llegado al poder, ha firmado acuerdos comerciales con China y ha estrechado relaciones", opina.
"La política internacional de Milei ha sido una política sui generis, excéntrica, como ha reflejado su personalidad", subraya Harto. "El balance es un balance ambivalente (…). Con los países con los que se ha enfrentado ha habido más de retórica porque luego en la realidad -en el caso de España, por ejemplo- no se han resentido las relaciones comerciales, simplemente se ha quedado a nivel de un rifirrafe verbal", añade.
Baja la popularidad de Milei, pero conserva la mayor parte de su apoyo
La confianza en el Gobierno del presidente Milei se recuperó en octubre después de una caída en septiembre, según una encuesta de la Universidad Torcuato Di Tella. Aunque su popularidad ha bajado desde que asumió el cargo hace un año, su índice de aprobación se mantiene en torno al 44%.
En las últimas dos décadas, solo el peronista Néstor Kirchner y Macri obtuvieron mejores resultados que Milei en el primer año de mandato.
En este primer año con Milei como inquilino de la Casa Rosada ha sorprendido la falta de manifestaciones masivas en un país con una tradición de ruidosas protestas callejeras. La más reciente ha sido la que se ha llevado a cabo tras el veto del presidente a una ley de financiación universitaria que otorgaba una subida de salarios a los profesores y más recursos. Alrededor de 250.000 personas salieron a las calles en protesta contra esta medida.
"Lo que ha tenido mensualmente ha sido algunas bajas de la aprobación en momentos en los que —por ejemplo— vetó una ley de financiamiento universitario. En algunas cuestiones puntuales, eso le hizo mella", explica Llenderrozas. "La educación pública universitaria en Argentina es un valor, es un principio y es algo que la sociedad defiende muy fuertemente porque tiene apoyo y reconocimiento. Haber tocado el financiamiento de las universidades fue un golpe también en su aprobación", indica.
Harto considera que "para lo que ha sido la gestión y para la cantidad de damnificados que han provocado sus políticas de recorte, lo que es sorprendente es que se siga manteniendo esa estabilidad en la popularidad". "La oposición todavía está tratando de encontrar su sitio. Milei se está beneficiando de la falta de unidad de la oposición y de su falta de claridad a la hora de construir una alternativa a sus políticas", recalca.
Y un año después, saber si "lo peor ya ha pasado" o las consecuencias de los recortes de la motosierra de Milei siguen siendo una incógnita.