El canciller alemán, Olaf Scholz, ha perdido la moción de confianza a la que se ha enfrentado en el Bundestag (el Parlamento alemán), el primer paso formal para la convocatoria de elecciones anticipadas tras el colapso de su Ejecutivo. El mandatario gobierna en minoría desde el 6 de noviembre, tras la salida del Partido Liberal de la coalición a tres bandas que formaban junto a Los Verdes y el Partido Socialdemócrata (SPD) del mandatario.

Han negado su confianza al mandatario 394 diputados de 717 que han entregado su voto; 116 se han abstenido y 207 han votado favor de su continuidad.

En su discurso previo a la votación, el canciller ha pedido la confianza, no ya a los diputados del Parlamento alemán, sino a los ciudadanos, con la vista puesta en las próximas elecciones generales, con el fin de apostar por una política con "madurez moral", "decencia", "sensatez" y "seriedad", tanto para reactivar a la maltrecha economía como para lograr la paz en Ucrania.

"Yo les pido hoy, estimados ciudadanos y estimadas ciudadanas, su confianza y su apoyo", ha dicho Scholz antes de someterse a la moción. El canciller permanece como líder interino hasta los próximos comicios, previstos para el 23 de febrero, aunque la fecha debe ser confirmada ahora por el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier.

Scholz, que ha culpado a su exministro de Finanzas, el liberal Christian Lindner — a quien destituyó en noviembre —, de haber dinamitado el Ejecutivo, ha admitido que en los últimos tres años de Gobierno la confianza de los ciudadanos ha sufrido por las constantes y "ruidosas" disputas que han roto finalmente la coalición, pero, ha dicho, "hablar mal, quejarse o incluso abandonar nunca ha mejorado nada en Alemania".

El líder de oposición: "Señor Scholz, no se ha ganado la confianza"

El líder del principal partido de oposición de Alemania, la Unión Cristianodemócrata (CDU), Friedrich Merz, le ha trasladado a Scholz en su turno de réplica que no se merece la confianza ni de las otras fuerzas ni de los ciudadanos. "Usted plantea la moción de confianza. Ha tenido la oportunidad", pero "señor Scholz, no se ha ganado la confianza", ha dicho Merz al concluir un discurso de unos veinte minutos como réplica a la intervención del canciller.

También en clave electoral, la candidata de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), Alice Weidel, ha advertido en contra de votar a los conservadores liderados por Merz, al afirmar que "conducirán al país a la guerra", al tiempo que ha criticado a Scholz por "malgastar" dinero en apoyar a Ucrania.

El canciller quiere que Alemania siga siendo el primer contribuyente de ayuda a Ucrania de Europa y ha señalado que no hace ni hará nada que ponga en peligro la seguridad propia del país centroeuropeo, en referencia a Merz, que aboga por enviar a Kiev misiles de largo alcance Taurus y por permitir al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, atacar el territorio de la Federación Rusa.

"Cualquiera que elija poner el destino de Alemania en manos de Friedrich Merz está eligiendo la guerra", ha dicho Weidel ante la Cámara. Su partido, AfD, ocupa el segundo lugar en las encuestas de intención de voto.

Scholz intenta sacar adelante medidas urgentes antes de los comicios

Mientras tanto, Scholz ha esbozado una lista de medidas urgentes que busca sacar adelante con el apoyo de la oposición antes de los comicios, incluidos 11.000 millones de euros de recortes fiscales y un aumento de las prestaciones por hijos a cargo ya acordado por los antiguos socios de coalición. Otras medidas con las que el canciller busca evitar que los ciudadanos "tengan que soportar más cargas fiscales" y hacer frente a los elevados precios de la energía parecen menos seguras.

"Hasta las elecciones, el Gobierno y el Parlamento mantendrán sus competencias y tenemos que tomar decisiones por responsabilidad con los ciudadanos", declaró Scholz la semana pasada, cuando también recordó que el dinero para las iniciativas que plantea ya está disponible y que solo falta la aprobación en el Parlamento.

Los conservadores de CDU, favoritos en las encuestas, han adelantado que solo van a debatir las propuestas "que deban tratarse de manera urgente", como ha indicado el diputado Thorsten Frei. Desde su formación han insinuado que podrían respaldar medidas para proteger mejor al Tribunal Constitucional de las maquinaciones de un futuro gobierno populista o antidemocrático y para ampliar un popular billete de transporte subvencionado por el Estado.

"Hay que tomar decisiones importantes que están siendo bloqueadas por la oposición", ha defendido, por su parte, la copresidenta del SPD, Saskia Esken, al diario Augsburger Allgemeine. "Seguimos esperando la reducción del precio de la energía. Friedrich Merz debería moverse en este sentido".

Alemania irá a las urnas en febrero

Tras la votación, corresponde a Steinmeier la disolución del Parlamento en el margen de 21 días y la convocatoria formal de elecciones. En teoría, podría encomendar a otros partidos la formación de un nuevo Gobierno, pero no existen otras potenciales coaliciones en el Bundestag y todos parten de que Steinmeier, afín al partido socialdemócrata, se ajustará al calendario pactado por los grandes partidos.

Tras renuncia de su popular rival, el ministro de Defensa Boris Pistorius, Scholz será nominado oficialmente como candidato del SPD en un congreso que se celebrará el 11 de enero. Ese día, se celebrará el tradicional debate general previo a las elecciones en el Bundestag, donde intervendrán todos los candidatos a la Cancillería, y la última semana de plenos concluirá el 21 de febrero.

Los sondeos pronostican la victoria de Merz, cuya formación va en cabeza con entre el 29% y el 34% de los votos, seguido de Afd con un 17-21%, con la que el resto de formaciones no cooperan.